Con el uso, el desgaste, los usos inadecuados o simplemente, el paso del tiempo, es bastante habitual que los suelos de mármol terminen perdiendo ese brillo limpio tan característico que reflejan al principio. Es un tipo de suelo cuyo uso es bastante común debido a este resultado tan bonito que ofrecen, pero puede resultar un quebradero de cabeza mantener el suelo en su estado inicial.
La mejor solución para recuperar el brillo es contar con un profesional que realice un pulido completo de la superficie con máquinas de calidad. Pero para el mantenimiento diario y que no se note tanto la perdida de brillo, te hacemos las siguientes recomendaciones:
- Prevenir es mejor que curar, por lo que podemos empezar haciendo un fregado semanal a fondo con productos que no sean abrasivos o dañinos en la superficie del mármol.
- Usar ceras y enceradoras sobre el mármol. Es un proceso lento, ya que primero debemos cubrir toda la superficie de mármol con el producto y, una vez seco, pulir con una esponja. ¡Cuidado con pisarlo después!
Ten en cuenta que, si enceras una superficie de mármol, no podrás utilizar fregasuelos convencionales, ya que estos contienen detergentes y otros productos que eliminarán la capa de cera que tanto te costó aplicar.
Si por el contrario en tu casa usáis suelos de cerámica, te recordamos que nuestro blog cuenta con un artículo sobre algunos trucos para sacar el mejor color a suelos de cerámica.