Si quieres tener los cristales de tu casa en perfecto estado y dejar paso a la luz exterior con toda facilidad no tienes más que seguir los consejos que te proponemos.
1.- Antes de limpiar consulta el tiempo.
Efectivamente, conviene no limpiar los cristales si en pocas horas se avecina una tormenta. De lo contrario harás el trabajo en vano y en pocos días tendrás que volver a comenzar. Anticípate a las inclemencias del tiempo y espera a que pase.
Es aconsejable limpiar cristales en días nublados, el sol no ayuda a esta labor porque seca enseguida la solución que apliques y tendrás que repetir la tarea varias veces.
2.- Utiliza productos especializados.
Todos vamos escasos de tiempo así que si puedes dedicar unos minutos de tu precioso tiempo a limpiar los cristales te aconsejamos que utilices productos limpiacristales especializados y no el primer jabón y/o bayeta que encuentres por casa.
3.- Solución casera.
Si preguntamos a nuestros mayores, seguro que conocen la mezcla de amoníaco o vinagre y agua caliente. Con esta solución podremos limpiar más intensamente la suciedad que se resiste.
Si no quieres que huela mucho a vinagre puedes echar unas gotas de limón que aromatizará el producto final. En todo caso, después de pasar el jabón o esta solución deberás aclarar con agua y bayeta apropiada. Desaconsejamos usar papel de cocina, papel higiénico o cualquier otro elemento que puedan rayar el cristal.
Esperamos que te haya servido de ayuda estos consejos y que disfrutes de unas ventanas limpias y cristalinas cuando los visillos y cortinas no los escondan.