Parece que ya el sol se deja ver, las lluvias nos dan una tregua y por fin podemos dejar el abrigo en casa. Sí, la primavera ha llegado.
Toca abrir las ventanas.
Después de un largo y frío invierno, es hora ya de abrir puertas y ventanas y dejar que entre la brisa primaveral.
Y es que, después de varios meses con chimeneas y calefacciones puestas, las partículas de polvo producidas por el calor y la poca ventilación, se han ido acumulando en esos rincones que pasan más desapercibidos.
Tal vez sea esa la razón de que en esta estación decidamos hacer una limpieza a fondo en los hogares.
Al ser los días más largos, podemos abrir las ventanas durante más tiempo para tener la casa bien ventilada.
Lavadora a tope.
Los días primaverales en los que la lluvia no hace su aparición, el sol aprovecha a calentarnos bien el espacio, por lo que podemos lavar ropa que sabemos se secará en poco rato.
Es buen momento para lavar cortinas, edredones, mantas, etc.. Aunque sea una tarea que, por higiene, se haga durante el invierno, ahora el secado es más rápido, no quedando en las prendas nada de humedad y favoreciendo la limpieza.
Lo que no veíamos.
Ahora que tenemos más horas de luz es más fácil ver el polvo acumulado en las estanterías altas, vitrinas, detrás de los armarios.
La cantidad de luz natural que entra nos ofrece una mejor perspectiva de con quien “compartimos” nuestra casa: los ácaros.
Aunque a simple vista no los vemos, sabemos que están ahí en esas motas de polvo que han pasado casi desapercibidas tanto tiempo.
Nada como aprovechar la buena temperatura para mover los muebles y hacer una óptima limpieza en todos esos rincones “invisibles”.
Cambios de ropa.
¡Por fin! Se acabó el ir como las cebollas, con tres o cuatro capas de ropa. Se pueden ir guardando abrigos, guantes, bufandas…
Es el mejor momento para hacer una buena limpieza de armarios.
No vale con descolgar unas prendas para colgar otras. Lo ideal es vaciarlo al completo y aspirar rincones, cajones, estantes… Pasar una bayeta húmeda con el producto más adecuado para nuestro armario y secar bien.
Ahora sí, con el armario limpio y fresco podemos guardar la ropa de esta nueva temporada.
¡Y disfrutar!
Ese es nuestro último consejo de este artículo: disfrutar del buen tiempo.
Nada cómo llegar a casa y que todo huela fresco, ¡sin necesidad de ambientadores!
Eso sí, para que esta limpieza, y bienvenida que damos a la primavera, no cueste tanto esfuerzo, recuerda que debes mantener tu espacio en orden, cómo ya os contamos en otra noticia anterior.
¿No te ha dado tiempo a esta puesta a punto? Tranquilo/a, no está todo perdido. Siempre puedes contactar con Hercam.